.

.

martes, 23 de diciembre de 2014

Feliz Navidad




Como todos los años por estas fechas, me gusta cumplir con la vieja y arraigada tradición  del "mensaje navideño", y lo que toca es felicitaros las fiestas a todos los valientes que con mayor o menor asiduidad os pasáis por este humilde blog.

Os deseo a todos y cada uno de vosotros unas felices fiestas y un prospero año 2015. Que la salud os respete y que nos os falten ganas y tiempo para entrenar y disfrutar  de las maravillosas  montañas de esta nuestra querida tierra astur-leonesa.

Una última reflexión de una persona mucho más sabía que yo (tampoco es complicado); "habiendo salud y teniendo cerca a familiares y amigos, todos los días del año  son NAVIDAD y todas las noches del año son  NOCHEBUENA".

Recordad que la vida solo es un camino y que todavía os  quedan muchos kilómetros por recorrer, en el año que empieza seguid el sendero de las luces amarillas y antes o después, llegaréis a vuestro destino.




La figura mitológica de reciente creación en el trail leonés, y que responde al nombre de "Rubén de Benavides" (también conocida como  el "Bisonte del Carbayedo") os desea a todos en la milenaria lengua de los antiguos astures:


BON AÑU 
PRESTOSES FIESTES NAVIDIEGUES



Nos vemos corriendo (o galopando) por montaña en 2015,


domingo, 14 de diciembre de 2014

Salva Calvo se pasa al Tractorismo

Salva Calvo con Tomás Baños y Rubén Álvarez,  en el momento de su presentación oficial

ÚLTIMA HORASalvador Calvo Redondo, el mejor corredor de montaña leonés de todos los tiempos, anuncia que se pasa al TRACTORISMO.
En el transcurso de la quedada preparatoria para la Transcandamia, se ha formalizado su fichaje para la temporada 2015. Dado su escaso bagaje es esta nueva modalidad deportiva , Salva contará con ficha del equipo filial: "tractorines y motocultores", aunque competirá con el primer equipo en algunas pruebas puntuales del calendario.
Salva comenta: "después de 30 años en la élite y tras ganar pruebas de prestigio en los 5 continentes, empiezo a estar cansado de correr tan deprisa y necesito nuevos retos en mi carrera deportiva. Siempre he querido sacar el tractor que llevo dentro, pero nunca me he atrevido a hacerlo por miedo a la reacción de la gente, pero tras ver la buena acogida que ha tenido Fernando Alonso compitiendo este año con Ferrari, creo que es el momento de "salir del armario" y demostrar que yo también estoy capacitado para correr muy despacio".
Tomas Baños (secretario del Club Tractorista de León) comenta: "tras hacerse público el fichaje de Salva, en las oficinas del club el teléfono no ha dejado de sonar, hay cientos de corredores, algunos muy buenos, que nos dicen que tras ver lo sucedido en en La Peña del Tren Trail, ellos lo quieren es correr a cola de pelotón. Estamos literalmente desbordados".
Jesús Linares (presidente del Club tractorista de León) comenta: "esto es un gran salto de calidad en el mundo del tractorismo, gracias a Salva nos llueven los patrocinios y estamos a punto de cerrar un acuerdo con John Deere para los próximas 2 temporadas por una elevada cuantía".
Rubén Álvarez (responsable técnico del club tractorista de león) comenta: " nos ha sorprendido la total predisposición de Salva, se ha ofrecido a engordar 10 kg estas navidades, a correr con piedras en la mochila o a correr por montaña en chanclas si fuera necesario, y todo con tal de ser capaz de llegar con los últimos a meta. Es un crack".
No obstante, no todo el mundo se ha alegrado con la noticia. La asociación unificada de organizadores de carreras por montaña ha mostrado su tremendo malestar por esta noticia. Su portavoz Gobitu Bode (organizador de la Redes Trail) ha dicho: " esta moda del tractorismo se tiene que acabar. Si todo el mundo corre despacio, en vez de una carrera de montaña, vamos a parecer una marcha solidaria de Carrefour o una salida senderista de los miembros del hogar del pensionista de Turón. Es una tragedia para nuestro deporte. Ya me veo poniendo mamparas, porque con el trail no me gano la vida".
Para acabar decir, que Salva ha recibido una felicitación muy especial por parte de Kilian Jornet (el mejor corredor de montaña del mundo en la actualidad) , el cual le ha confirmado personalmente que dentro de su proyecto "Summits of my life" su reto más difícil es llegar a meta con el corredor escoba. Intentará conseguirlo a finales del año 2015 tras subir y bajar al Everest en un solo día (aunque este reto lo ve mucho más factible).

Solo nos queda desearle mucha suerte a Salva en esta nueva etapa de su vida deportiva,

miércoles, 10 de diciembre de 2014

La Peña del Tren trail 2014

Es prácticamente imposible explicarle a un profano en la materia, que fuerza desconocida nos hace levantarnos de la cama a las 5:30 de  una fría mañana de domingo en el mes de diciembre, para hacer 100 km con el coche e ir a correr 26 km por montaña, sin embargo esa extraña fuerza se reatroalimenta una y otra vez de las experiencias vividas junto a los compañeros con los que compartimos aventura, lo que hace que se vuelva cada vez más poderosa. Esa fuerza gravitatoria, en lo que a las carreras por montaña se refiere, es de tal magnitud, que a quien cae en su campo de atracción, le resulta imposible escapar de ella. Y es precisamente esa extraña fuente de energía, la que hace que  tras pasar 4 meses parado por causas de fuerza mayor, sientas que ha llegado la hora de calzarte de nuevo las zapatillas de montaña y salir a competir, aún cuando la lógica más elemental  te dice que  probablemente esta carrera llega demasiado pronto para ti  y que con total seguridad hubiese sido mucho más prudente disputar la prueba corta, pero uno no puede evitar ser como es y cuando repartieron el sentido común, los asturianos llegamos tarde y ya se había agotado el cupo, razón por la cual los dioses decidieron compensarnos con una dosis extra de arrestos y mala leche.

Y es que a veces parece que el destino conspira a tus espaldas. Para empezar me tocó una inscripción gratuita gentileza del blog Media Maratón León (aprovecho para dar  las gracias  al cabeza visible del proyecto que es Luis Ángel Esquibel) y para continuar tuve la inmensa fortuna de poder  compartir viaje con la gente del Club Atletismo León, toda una experiencia. Esto sumado a la posibilidad de compartir km con don Tomas Baños, genio, figura y alma mater de Correcallejeros la Virgen del Camino, constituyó el caldo de cultivo perfecto que acabo por inclinar la balanza a favor de "debutar" de nuevo  en la Peña del Tren, una carrera de montaña que no es  ni la más espectacular, ni la más dura, ni la más pintoresca, pero que tiene algo que engancha.

Y ya es hora de centrarnos en la carrera propiamente dicha.

Foto de familia en la salida con algunos miembros de "La comunidad del Tractor"

A las 9:15 y tras la pertinente cuenta atrás, dan la salida con  0ºC de temperatura y una sensación térmica que hacia que se te congelasen hasta las pestañas. Las 2 pruebas (Cross y Trail) arrancan simultáneamente lo que ocasiona que unos 320 penitentes, no sé si por escapar del frio o por las  ganas de disfrutar de la montaña, salgan como verdaderos miuras. Tomás Baños, Jesús Linares  y yo salimos sin prisa y a cola de pelotón. Como era previsible, teniendo en cuenta que estábamos en pleno puente de La Constitución, cuando apenas llevábamos disputados 150 metros nos encontramos con un megaatasco que en nada desmerece a la operación salida en Madrid capital . Valga como referencia  que en los primero 6 minutos de carrera solo habíamos conseguido avanzar 275 metros (y a 22 min/km el tiempo estimado de carrera supera con holgura  las 10 horas). 

Galopando con Jesús Linares en el km 3
A partir de este momento, y ya con los pies mojados, entramos en un camino que durante  3 km aproximadamente nos lleva por un terreno ligeramente descendente, mullido  y donde se corre muy cómodo, hasta que  a los 3.5 km y para entrar en calor, nos encontramos  a los pies de la primera gran subida del día.

A Los pies del primer cortafuegos (km 3'5 aprox.)

Con las fuerzas intactas y la moral por las nubes nos disponemos a subir los 3 avezados "tractotes", más Laurina Blanco que se había  unido al grupo,  constituyendo una pintoresca "Comunidad del Anillo" en versión tractorista.

Vista de la parte final del primer  cortafuegos

Subimos el cortafuegos sin contratiempos y llegamos al primer avituallamiento del día (km 4). Parada rápida y a continuar. No no podemos despitar en demasía  porque   si no vamos los últimos de la prueba larga, poco nos falta. Continuamos subida, coronamos este primer repecho e iniciamos el descenso,  inicialmente por un camino pedregoso y con mal firme y posteriormente por  un cortafuegos, hasta que al llegar al km 7 ¡¡¡sorpresa!!! nos encontramos con que debemos atravesar lo que parece ser un antiguo camino abandonado con escobas que superan los 2 metros de altura en algunos tramos. Un autentica selva al estilo Cabrera-Valdería, de esas que te hacen pensar que Frank de la Jungla, está haciendo el bobo en Tailandia teniendo estos terrenos tan cerca de su casa (Astorga apenas dista 50 km de aquí).

Avanzamos  en fila de a uno, de avanzadilla enviamos a  Jesús que para eso tiene formación militar,  unos 20 metros por detrás voy yo y a igual distancia intuyo que me siguen Tomás y Laurina, y digo intuyo porque como las escoban son altas, a Jesús si le veo la cabeza, pero a  Tomás y Laurina no, solo veo que se mueven las escobas, de manera que   si me viniese siguiendo un jabalí, seguiría dando por sentado que es Tomás quien viene detrás. A medio sendero Jesús se detiene, nos agrupamos y nos hacemos un foto para la posteridad. Somos una especie de sucedaneo de  Equipo A de las carreras por montaña y vivimos el primer momento surrealista de la mañana. Yo arranco por delante ejerciendo de  explorador, detrás mía se pone Jesús, por detrás Tomás y cierra Laura. En ese momento Jesús se pone a  twittear en tiempo real, al tiempo que avanza, mientras Tomás le intenta guiar por detrás ¿Creéis que nos preocupaba la integridad física de nuestro compañero Jesús? ¡¡¡Nooo!!!, lo que realmente nos preocupaba es que si se caía, podiamos perder el teléfono móvil o lo que es peor, podríamos perder cobertura en cualquier momento y  no podríamos inmortalizar el momento. ¡Jesús, ten amigos para esto!.

El Equipo A en medio de la jungla (km 7,5 aprox.)
En el km 8,5 abandonamos del sendero, y en apenas km y medio nos encontramos con el segundo avituallamiento de la jornada (km 10).

Con Carlos, Jesús y Tomás en el segundo avituallamiento (km 10)
El cuaderno de bitácora marca un tiempo de paso de 1h:38':02". ¡La virgen! que despliegue de medios, pedazo de avituallamiento con el que nos sorprenden en  cumbre, tanto por cantidad, como por variedad, más que un punto para reponer fuerzas, parece el menú de una boda gitana. Me quedo hablando un ratín con el fenómeno de  Gobitu Bode y mis compañeros de expedición se van por delante. Arranco  tranquilamente en compañia  de Carlos Justel, que ejerce de corredor escoba para la prueba larga.


Comenzando el descenso tras reponer fuerzas
El límite es el infinito. Esto es lo que vemos los corredores en carrera
 Los siguientes 2 km los hacemos juntos,  intentando arreglar un poco, las a veces revueltas aguas del mundo de las carreras de montaña y los circuitos de carreras por tierras leonesas, sin entender muy bien como en lugar de remar todos en la misma dirección, de vez en cuando  se establecen bandos, con presuntos boicots y cosas de índole similar, en fin, seguimos a la nuestro.

En compañia del corredor escoba  Carlos Justel (km 11,5 aprox)
Salimos del cortafuegos, nos desviamos a la izquierda y entramos en un tramo de bajada pendiente por sendero que nos llevará a la carretera de Torneros. Me dejo caer y mi elevado peso se encarga del resto, consiguiendo bajar a un ritmo elevado.

Tratando de frenar al final del descenso previo al km vertical (km 12 aprox.)
Llegamos abajo, apenas 100 metros de respiro y nos enfrentamos al "km vertical" de la prueba (en sentido estricto es un km de distancia pero con unos 300 metros de desnivel positivo aprox.). Llego al control de paso a pie de cortafuegos con un tiempo de 2h:01':21", En este  cortafuegos fue donde me quede tirado en mi ultima participación (año 2011) con los gemelos tocando la parte trasera de mis rodillas y aullando  como un lobo estepario. Quizá por esta razón, empiezo con prudencia la subida, pero voy con buenas sensaciones y poco a poco voy adelantando corredores,  hasta alcanzar de nuevo a mis 3 compañeros de aventura.

A mitad del Km vertical con Tomás y Laurina justo detrás
A 250  metros de cumbre en el km vertical
Finalmente consigo coronor el "km vertical" con un tiempo de  2h:17:15, haciendo unos dignos 15':52" (puesto 156 sobre 226 corredores en liza entre cross y trail). En cumbre, Jesús y yo echamos a correr suavemente y Tomás y Laurina ya se quedan definitivamente por detrás. Constatamos que vamos muy enteros físicamente, tenemos los tiempos de corte controlados y la moral alta, por lo que entendemos que hasta que estamos gestionando correctamente la carrera.

Coronando el km vertical con  Jesús Linares justo detrás
Pasamos por meta (km 18) en 2h:41:48 y nos tomamos un merecido descanso. Llegan los últimos corredores de la prueba corta y los vencedores de la larga y nosostros en medio del fregao disfrutando del ambiente. Tal es nuestro desparpajo, que mientras yo me pido un caldo caliente (más bien creo que era sopa de ajo) que me entona el cuerpo y me viene de lujo, a Jesús le llegan a preguntar si ya hemos acabado la prueba. Supongo que nuestro modo de correr "bohemio", es contraproducente en un mundo tan competitivo como el actual, pero a si somos los practicantes de esa nueva modalidad conocida como "tractorismo".

Unos 5 minutos más tarde arrancamos camino de nuestros últimos 10 km de prueba. Vamos avisados de que son complicados y que hay 3 subidas de infarto. A nuestro ritmo vamos cruzandonos con compañeros que ya bajan camino de meta, entre ánimos y saludos, ascendemos la primera cumbre, nos lanzamos para abajo por un empinado cortafuegos, giramos a la izquierda, otro km fuera pista por medio de un pinar y de bruces con la segunda subida. un cortafuegos de aupa. Casualmente en el tramo de bosque  me encuentro con otro corredor de la zona Kuko badana ( @elrunnerfeo) vamos juntos unos 500 metros y él se queda haciendo fotos al empezar esta subida. Subimos cómodos, alcanzamos a Juanjo Prieto casi en cumbre y nos dejamos caer hasta el último avituallamiento de la prueba, donde vivimos el segundo momento kafkiano de la jornada. En está bajada mis cuadriceps empiezan a chirriar y me voy poniendo en lo peor para la última bajada del día. Entrando en el avituallamiento me pregunta una voluntaria si soy Rubén de Benavides y le contesto que si. Me comenta que le han dicho que yo soy el último de la prueba  y que ya no viene nadie por detrás, Le comentamos que solo desde el paso por meta hemos adelantado al menos a  9 corredores, más los que venían detrás de antes, vamos que por detrás deberían venir unos 15 o 20 más, y la chica me insiste en que a ella le han dicho que Rubén con la camiseta del Benavides es el "escoba virtual"y cierra la carrera. Una vez aclarado el entuerto y una vez nos hemos echado unas risas con los voluntarios, que lo cierto es que ayudan en todo y generan buen rollo, mi compañero de fatigas y yo, nos enfrentamos a la última subida de la jornada. Me voy de ese punto rumiando que hemos encontrado una nueva criatura para la mitología del trail leonés,  El "Rubén de Benavides", asi que ya sabéis, si yendo en carrera os adelanta un corredor grande y alto con una camiseta de rayas horizontales rojas y blancas, daros por jodidos, que vais fuera de control.

 No se si es porque al igual que los tiburones huelen la sangre a kilómetros de distancia, a los corredores nos sucede lo mismo con la linea de meta, pero lo cierto es ascendemos  a buen ritmo y coronamos la última subida de la jornada en 4h:05':11". Sabemos que lo hemos dejado atrás y que solo nos quedan 1,5 km de bajada y medio de llano hasta el pueblo. No hemos avanzado ni 300 metros cuado se me  acalambran los cuadriceps y tengo que ponerme a caminar. Mi eterno problema de calambres es mi talón de Aquiles particular, incrementado en estos momentos por el hecho de no poder ingerir ni geles, ni magnesio, ni otras suplementos por cuestiones medicas, lo que me deja en una situación delicada, y suerte que hoy gracias al intenso  frío, apenas he sudado y no he perdido excesivas sales minerales por sudoración. Jesús va unos 50 metros por delante y le digo que tire y se vaya  solo para meta que voy tocado, pero como buen compañero, baja el ritmo y me espera. Acabamos la bajada, cruzamos el puente sobre el río Ería y encaramos el tramo final.

Los últimos 500 metros los hacemos a  ritmo de 5,10"" por km (un  ritmo muy digno  teniendo en cuenta que ya llevábamos 25 km en las piernas) y  nos plantamos en meta con un tiempo de 4h:18'39", completando los 26 km de la prueba   en el puesto 128 sobre 170 corredores inscritos (143 corredores en meta).


Llegando a meta en compañía del gran Jesús Linares tras 26 km juntos

Para completar un gran día todavía  me queda queda una agradable comida en compañía de  los miembros del Club atletismo Léon, unos chicos que además de ser unos corredores fuera de serie (acaban de quedar campeones de la III Copa Diputación de León en su primer año de existencia como club) son una gente cojonuda en el plano personal y que generan un buen rollo y un gran ambiente allí donde van, razón por la que son conocidos y muy apreciados dentro el mundillo de las carrreras populares en Léon.

Finalmente agradable viaje de vuelta con mi compañero de fatigas Jesús Linares (mil gracías por todo "presi"), Gabriel  y su novia, con la satisfacción del deber cumplido.


No quiero acabar la entrada  sin dar mi opinión PERSONAL (e intransferible) sobre la prueba. 
Hay 2 pequeños detalles (de indole menor)  que no me han gustado y que creo que podrían ser susceptibles de mejora:
1.- El atasco del km inicial. Yo soy senderista y no me afecta perder 5 o 10 minutos en un embotellamiento, pero para muchos corredores que no lo conocían y les ha pillado por sorpresa, entiendo que les ha podido condicionar la carrera (especialmente a los del Cross).
2.- El tramo de selva entre escobas puede ser pintoresco, pero lo cierto es que personalmente he acabado con las piernas llenas de pinchazos y arañazos, tal parecía que me había peleado con un gato montés. Entiendo que se puede desbrozar un paso estrecho y en ese caso, este tramo sería mucho más llevadero, sin perder ni un apice de su encanto.

Dicho esto, La Peña del Tren es una prueba de autor, que no se guía por convencionalismos, ni modas y es fiel reflejo de su creador Santi Nistal. Es una carrera que en su modalidad de cross, es ideal para aquellos corredores que quieran dar el salto de carretera a trail. Una prueba que  sin tener nada especial a priori, tiene esa magia que distingue unas carreras de otras y las hace especiales. Solo queda darle una nota muy alta a la prueba por organización, voluntariado, comida final, avituallamientos y actitud y cariño de los vecinos del pueblo. Muchas gracias a todos. Si los vientos son propicios, volveremos a vernos en 365 días.

Próxima parada: Transcandamia 2015.

domingo, 31 de agosto de 2014

Spartan Race 2014: Sorteo inscripción gratuita



La Reebok Spartan Race es una carrera de obstáculos de gran dureza, diseñada para deportistas amantes de las emociones fuertes y que tiene su origen el Vermont (USA) en 2010. Actualmente  tiene la consideración de mejor circuito de carreras de obstáculos del mundo,  se desarrolla a lo largo de todo el planeta e incluye una clasificación unificada a nivel mundial.  

Una de las pruebas del circuito se disputará próximamente en la ciudad de Barcelona y tendrá la consideración de campeonato de Europa de la categoría. La Spartan Race se disputará bajo 3 modalidades diferentes:


* Sprint:  5 km de distancia  y 15 obstáculos
* Super: 13 km de distancia  y 21 obstáculos
* Beast: 20 km de distancia  y 26 obstáculos

La prueba tendrá lugar el sábado 27 de Septiembre en las modalidades Super y Beast  y el domingo 28 de Septiembre en la modalidad Sprint

En fechas recientes, un miembro de la organización de la Reebok Spartan Race se puso en contacto conmigo para ofrecerme una inscripción gratuita para disputar dicha prueba. Si bien podría utilizar dicha inscripción para uso personal, me gusta más la idea de sortear la inscripción  entre todos aquellos que "espartanamente" habéis aguantado mis crónicas y una buena manera de agradecéroslo es sortear dicha inscripción entre todos los que pudieran estar interesados.

Para participar el mecanismo es muy sencillo, solo tenéis que dejar un comentario en esta entrada (y recordad que no tendrá más posibilidades quien afirme verme más delgado, más rápido corriendo o con mucho potencial en el mundo de las carreras por montaña...aunque mi ego podría beneficiarse de tan piadosas mentiras). A cada persona interesada le asignaré uno o varios números diferentes en función del número de interesados y se realizará un sorteo con 15 días de antelación a la fecha prueba (o el 11 o a más tardar el día  12 de septiembre)
La fecha límite para participar es el 10 de Septiembre (a las 24:00 horas), no existiendo  ningún requisito previo y pudiendo  participar cualquier persona interesada, sea seguidor o no habitual de este  blog,  El ganador podrá  elegir en cual de las 3 modalidades de carrera quiere participar. Aunque a la mayoría de los que leéis este blog ya os tengo localizados, los "nuevos" no olvidéis dejar una dirección de correo electrónico para poder contactar con vosotros en caso de ser los agraciados

Para explicaros mejor lo que es esta prueba,  os dejo justo aquí debajo lo que referente a la carrera publica la página web Runner's World  (www.runners.es):

"Tras la buena acogida de la primera edición de la Reebok Spartan Race de Rivas Vaciamadrid, con récord europeo de participación incluido, la dura y divertida prueba pondrá rumbo a la ciudad condal el próximo 27 de septiembre. Tendrá lugar en el espacio Les Comes, donde miles de espartanos runners correrán al ritmo de su famoso grito de guerra: ‘Espartanos, ¿cuál es nuestro oficio? ¡Aú, aú aú!’.

Asimismo, la carrera presentará una nueva modalidad que no vivieron los espartanos madrileños, la Spartan Race Beast (más de 19km y 25 obstáculos), que permitirá a los valientes guerreros de las zancadas la consecución de la ansiada ‘Trifecta’ (completar en un año las tres distancias Spartan). Y, además, albergará los Campeonatos Europeos de la categoría. No obstante, también se disputará la Spartan Race Súper (más de 12km con un mínimo de 21 obstáculos). Una de las peculiaridades de la innovadora carrera es que los participantes no conocerán, antes de terminar la Spartan Race, el recorrido, la distancia exacta ni la composición de los obstáculos. Algunos de los obstáculos que tendrá que superar los participantes serán los siguientes:
  • Subir muros.
  • Trepar por cuerdas.
  • Levantamiento de peso.
  • Pruebas de equilibrio en estrechos troncos.
  • Arrastrase bajo tubos y alambradas.
  • Batirse con duros gladiadores.

El precio de inscripción a la carrera es, actualmente, de 68 euros para la Spartan Race Súper, y de 94,25 euros para la Spartan Race Beast. No obstante, los corredores que se inscriban por equipos podrán beneficiarse de descuentos según el número de dorsales. Aún así, recuerda que, como es habitual en la Reebok Spartan Race, el sistema de inscripción subirá de precio a medida que se incrementen los apuntados a la prueba"





Para más información se puede visitar la  página web oficial de la Reebok Spartan Race

Para cualquier duda que os surja, podéis poneros en contacto conmigo. Mucha suerte a todos los interesados en la plaza.

viernes, 22 de agosto de 2014

Carrera de Montaña Villalfeide Polvoreda 2014

Siempre hay carreras que nos gustan por encima del resto y en mi caso no me cuesta reconocer que   siento una especial predilección por esta prueba, por múltiples razones  como el precioso entorno en el que se desarrolla, el diseño del recorrido,  la fantástica organización y por encima de todo por el ambiente de la prueba y la implicación de los vecinos y voluntarios de Villalfeide,  que consiguen que sientas como en casa desde  el primer momento que pisas el pueblo.

A las 9 de la mañana y tras guardar un respetuoso minuto de silencio en memoria de  Miguel Ángel Pérez montañero leonés recientemente fallecido en el K2), arranca la prueba. Por delante  28 km de distancia y 3500 metros de desnivel acumulado. Salgo con el único objetivo de completar la prueba en las  5 horas de tiempo límite que ha estipulado la organización.

Salida de la prueba en compañia del corredor escoba
Arranco muy despacio y en compañía del corredor escoba. No me he levantado con buen cuerpo y tengo dudas razonables sobre como va a responder mi organismo a lo largo de la prueba. Primer kilómetro muy cómodo y en descenso, cruzamos un par de puentes y en seguida comenzamos la primera ascensión del día. Por una cómoda senda ascendemos la cara norte del Cueto Salón, en el km 4 y sin llegar a tocar cumbre, te  desvían y comienza la bajada por una antigua escombrera de apenas 30-50 metros de longitud, 


Surfeando cuesta abajo en la Escombrera
para a continuación entrar en un bonito sendero que discurre por un bosque de robles y hayas. La bajada carece de dificultad técnica y se puede correr deprisa, pero mi objetivo es administrar  fuerzas por lo que procuro ir a  medio gas. 

Primera bajada de la prueba
Primera bajada de la prueba
A unos  500 metros de Villalfeide me encuentro con el aventurero leonés Jesús Calleja que va caminando en solitario. Por compañerismo y como haría con cualquier otro corredor, me detengo un segundo para preguntarle que tal se encuentra y tras  confirmarme que se encuentra bien, sigo mi camino para tratar de completar mi particular "desafío extremo". Mientras me alejo no puedo dejar de pensar en lo caprichosa  que es la vida  y lo complicadas que son las carreras por montaña en ocasiones.  Este caballero lleva años asumiendo importantes riesgos por algunos de los parajes  más inhóspitos del planeta y nunca  le sucede nada  y casualmente va a sufrir un percance  a   menos de 40 km de su casa y en una bajada sin apenas dificultad. 


En el km 7,5 se realiza el primer paso por el pueblo de Villafeide  (primer control de paso). Pasó por debajo del arco de meta en 1h:02':30" (con 27 minutos de margen sobre tiempo límite)  y me sorprende encontrarme con el bueno de Paquito de La Bañeza, genio y figura del trail leonés.  En su grata compañía discurrirán los siguientes 4 km de la prueba, hasta coronar la segunda subida de la jornada, momento en el que aprieto al entrar en en mi tramo favorito de la carrera.  Se trata de un estrecho sendero  ligeramente descendente  que atraviesa un tupido bosque de robles. Este año voy completamente en solitario,  por lo que puedo correr a muy buen ritmo y disfrutar como no había podido hacer en ediciones anteriores. Tras un kilómetro y medio, salimos del bosque, giramos a la derecha y cogemos  la amplia pista que nos baja de nuevo al pueblo.  Dejo que la gravedad realice su trabajo, y bajo a muy buen ritmo, llegando de nuevo al pueblo de Villafeide en 1h:49':02". Un pequeño descanso en el avituallamiento liquido y  comenzamos la subida al coloso de la jornada: el Picu Polvoreda.  Por delante  tenemos que ascender unos 1000 metros de desnivel positivo en apenas 4 km de distancia ( lo que equivale  una pendiente media del 25%) y ya llevamos 16 km de castigo en las piernas lo que nos da idea de la dificultad del proyecto. 

El tramo inicial de subida lo realizo primero en compañía del Mediático  Juan Jose Prieto, luego de Jesus Linares y  finalmente de Arcadio Sanchez, y con esta buena compañía se hace muy cómodo el ascenso hasta llegar el avituallamiento de La Peñica, donde se encuentra el segundo punto de control de paso. El Garmin marca   2h:09':46" (35 minuto de margen sobre el tiempo límite), mucho mejor de lo esperado y lo más importante es que aparentemente no  voy muy castigado. Aquí toca parada larga en boxes  y mis 3 compañeros de viaje se van por delante. Hoy no puedo ingerir geles, barritas energéticas, bebidas isotónicas, ni otros alimentos sólidos, por lo que debo reponer fuerzas únicamente a base de agua, un puñado de frutos secos y algún trozo de plátano. El calor empieza a apretar, por lo que decido llevarme una botella de agua y sin más dilación arranco los durisimos últimos dos km de ascensión en soledad.  A ver como me arreglo para llevar  los   100 kg del bisonte hasta la cumbre de la montaña sin que las piernas me monten un referéndum de independencia a media subida.

La subida es constante, muy  dura y sin apenas descansos,  no obstante voy ascendiendo relativamente cómodo y con buenas sensaciones. Supero el descansillo que hay aproximadamente a 1500 metros de altura y enfilo los últimos 500 metros verticales hasta cima, que ahora si se me empiezan a hacer cada vez más difíciles. El paso empieza a ser cada vez más cansino y no veo pasar las distintas cotas ¡ufff! 1600, 1700, 1800 metros de altitud... las piernas pesan un montón, puedo escuchar cómo me late el corazón, como se me acelera la respiración y sigo sin ver cumbre, hasta que supero la cota de los 1950 metros de altitud  y a unos  200-2500 metros de distancia puedo  ver la bandera de León que esta e la cumbre, entre el subidón de ver cumbre y los ánimos de Tomas Baños, me vengo arriba y asciendo los últimos 30 metros corriendoTípica fanfarronada asturiana, que sirve para posar en las fotos y para malgastar las escasa fuerzas que van quedando. 

a unos 100 metros de la cumbre del Pico Polvoreda
a 20 metros de la cumbre 
Coronando el Pico Polvoreda
Alcanzo el vértice geodésico de la cumbre a 2.007 metros de altitud y supero el control de paso en 3h:13':00 (47 minutos de margen sobre limite de paso). Tengo la sensación de que la carrera ya la tengo en el bolso y no deja de ser un pensamiento peligroso cuando todavía queda un mundo hasta meta.

Cumbre del Pico Polvoreda a 2.007 metros de altitud
Comienzo la bajada y es un deja-vú del año anterior. Apenas necesito 50 metros para darme cuenta de que me he quedado sin cuádriceps. Todavía me quedan más de  1.000 metros negativos por superar  y por un terreno muy técnico en determinados  tramos. Me paro a estirar en un peña y como ya tengo el titulo de "experto en gestión de finales de carreras sin piernas" me hago a la idea de que tocará sufrir. A media bajada me supera Juan Jose Prieto que baja como una moto a la caza de Veronides. Me la tenía guardada el muy mediático desde  la Batallona y hoy se está desquitando con creces. Baja como un autentico corzo ¡que bestia!.

En el último avituallamiento del día me empiezo a notar muy cansado. No es que muscularmente vaya justo, es que se empiezan a encender pilotos de aviso por todo el cuadro de mandos. Llegamos abajo y comenzamos la última subida del día. Es  apenas una colina con 100 metros de desnivel positivo y por pista en muy buen estado, pero es que todos los años esta tachuela se convierte para mi en poco menos que  "el muro" que protege la frontera norte de  Invernalia.


Comenzando la cuarta y última subida de la prueba
Tengo margen de sobra  y el control de meta no me preocupa, así que lo que toca es sobrevivir.  Corono la colina y apenas quedan 2,5 km a meta y son cuesta abajo. Tengo   los cuádriceps duros como bloques de hormigón,  pero esta vez al menos  aguantan sin subirse. Pues a caminar, caminar,  caminar y correr lo poco se pueda, y  mira que es una bajada cómoda y con escasa pendiente, apta para ir a fuego, pero sin piernas, con el calor que hace   y con el piloto rojo del combustible  indicando que te estas quedando sin una gota de gasolina, solo queda poner buena cara y avanzar.



Pasando por Villarinos con el Picu Polvoreda al fondo
Bajada final (a 1 km de meta aprox.)
Último tramo de la bajada final (entrando en Villalfeide)
Sin embargo entre los fotógrafos y la proximidad de la meta, uno se lanza a correr,  no se si es por puro postureo runner o por vergüenza torera, y como a nadie le gusta entrar andando en meta, aprieto en la bajada final para entrar corriendo en meta.

Entrando en meta
En meta paro el reloj en 4h.27':51", puesto 127 de la general  (sobre 157 en meta y 165 en  salida) a 1h:49':16"  del ganador que fue Pablo Villa con 2h:38':35".


Perfil de la carrera de monta;a Villafeide/Polvoreda 2014
Ya solo queda el apartado de conclusiones y agradecimientos.

CONCLUSIONES:


1.- EL PALO: Practico el deporte más sencillo y más justo del mundo. Es el más sencillo porque para correr solo  hay que mover alternativamente las piernas lo más rápido posible y es el más justo porque aquí no hay disculpas posibles, el resultado no depende nunca de decisiones arbitrales injustas , ni polémicas, ni fallos mecánicos. Para mejorar. el único secreto es entrenar y si no lo haces, pues a lo máximo que puedes aspirar es a acabar y gracias (como es mi caso). Digo esto porque para esta carrera el viento soplaba a favor y no lo supe utilizar. Venía con la moral muy alta después de haber rendido en La Batallona por encima de mis posiblidades y tenía 3 semanas de vacaciones antes de la prueba,sin embargo y  dado que tengo la capacidad de planificación de la marmota canadiense y la constancia del murciélago panameño, solo fui capaz de calzarme las zapatillas de deporte en 2 ocasiones en los 14 días previos a la prueba. Con este panorama tan desolador poco recorrido tengo en el trail, casi mejor me paso a la petanca o los bolos que son actividades menos exigentes.


2.- LA PALMADA EN LA ESPALDA: Esto va dedicado a aquellos que padecen EII y en especial al colectivo de #deportistas EII. No me suele dar mucha guerra y nunca me había sucedido el dia de la carrera, pero al levantarme a las 6.30 de la manana mi viejo amigo el Crohn se paso a saludarme. Lo fácil y probablemente lo mas prudente, quizás hubiese sido quedarse en casa, pero eso hubiese sido dar la batalla por perdida antes de comenzar y esa no suele ser nuestra filosofía de vida. Cada caso es diferente y cada persona es un mundo, pero a mi hoy me ha servido para corroborar lo importante que es la actitud, para demostrarme que quien quiere puede y como dice nuestro lema para demostrarme que NADA NOS PARA.


AGRADECIMIENTOS: 


1. GRACIAS A TODOS y cada uno de los voluntarios por lo que hacen y por como lo hacen, gracias a ellos correr es mucho más fácil.

2. Gracias a todos lo corredores con los que he compartido prueba y en especial al poker de fenómenos compuesto por : Juan Jose Prieto, Jesús Linares, Arcadio Sanchez  y el gran Paquito de La Bañeza, porque  los km que hemos compartido se me han hecho mucho más llevaderos.


3. Por último gracias a todos los fotógrafos y en especial a 3 Tomás Baños, Sara Vega y Alan Arana,  porque gracias a vosotros tengo un book de fotos que ya quisieran algunas Top Models altamente cotizadas. Es que sois tan cojonudos que hasta habéis conseguido que parezca corredor de montaña y no senderista.


Para mi esta carrera sigue siendo un auténtico lujo para las carreras por montaña de Léon, asi que confío en poder volver el año que viene.

Próxima parada: Legua y Media Nocturna de Benavides (la carrera de mi equipo)

Nos vemos corriendo

P.D: Estoy realizando gestiones con la organización de una carrera ciertamente original, para poder premiar a alguno de los locos que tenéis el valor de leer este blog. Si todo sale bien, igual la semana que viene os doy la sorpresa y a uno de vosotros le puedo regalar una inscripción gratuita para dicha  carrera. Ya os iré contando en que acaba todo.

viernes, 11 de julio de 2014

La Batallona de Somiedo 2014

Es curioso como el destino mueve sus hilos para dirigir de manera imperceptible nuestro devenir. Si no fuese así,  difícilmente podría explicar el como y el porque acabé corriendo este año La Batallona de Somiedo

Para empezar, la inscripción me tocó de manera gratuita 3 meses atrás en el Trail de La Biosfera, precisamente la prueba en la que  cansado de acabar todas las carreras convertido en zombi de The Walking Dead,  decidí parar completamente y no volver a competir más  hasta tener un nivel físico minimamente aceptable. Y en esas estaba,  tras más de 2 meses y medio de descanso absoluto, donde las zapatillas de montaña ya no es que tuviesen polvo, sino que casi habían desaparecido ocultas por las telarañas del zapatero donde estaban escondidas, con un sobrepeso más propio de un león marino en época de abundancia que de un deportista y sin la más mínima intención de competir, cuando la casualidad quiso que apenas una semana antes de la prueba me encontrase con el gran Salvador Calvo (capitán del equipo leonés en la prueba), para mi el mejor corredor de montaña de la historia de León y un autentico señor en todos los aspectos. Salva es una de esas personas que no necesitan hablar mucho para convencer y yo soy uno de esos inconscientes que no necesitan escuchar mucho para dejarse convencer, así que supongo que se juntaron el hambre y las ganas de comer, en cualquier caso si el gran capitán de pide que vayas ¿quien eres tu para decirle que no? y así se fraguó mi vinculo con La Batallona.

¿Más casualidades? cuando de joven practicaba atletismo, las temporadas solían comenzar   con una concentración en altura en el mes de septiembre y  la última de dichas concentraciones tuvo lugar  en Saliencia, precisamente el pueblo asturiano más cercano al Alto de la Farrapona. No recuerdo el año exacto, pero si recuerdo con nitidez que no había vuelta a correr en suelo asturiano desde el año 1999, por lo tanto llevaba algo más de quince años sin competir en mi tierra  y una vez más  los hados han querido que vuelva a arrancar casi en el mismo punto donde lo había dejado.

Y así comienza esta descabellada e inverosímil historia,  con 4 sesiones de entrenamiento a pie (28 km de CACOS entrenados) y 2 sesiones de 1 hora en bici (48 km acumulados),  nuestro insensato  protagonista se planta en el Alto de La Farrapona.  La misma locura de siempre en diferente escenario.

Camino de la salida me detengo en  Pola de Somiedo para recoger  la camiseta y el dorsal. El  cielo está tan oscuro y el día tan desapacible,  que si no llega a ser porque no veo ningún orco cerca, podría pensar que la carrera tendrá lugar  en el mismísimo Mordor. Y es que los asturianos juegan en casa y han decidido partir con ventaja, así que han encargado al departamento de atrezzo unas condiciones meteorologías  tipicamente asturianas.

Salida de La Batallona de Somiedo 2014
Llegamos al Alto de La Farrapona unos 45 minutos antes de la hora de salida. Las condiciones son  12º C de temperatura, lluvía fina  y niebla densa. Llega la hora de tomar la salida y con mi caraja de costumbre, me pierdo una de las partes más emotivas de la prueba: los himnos de Asturias y León,  por encontrarme absorto con temas relacionados con el mundo de la "moda runeril",  que si llevo  o no MP3, que si corro con GPS o con reloj normal y por último si voy con o sin chubasquero, ahora me lo quito y voy a la salida, ahora me arrepiento y busco al chofer como un loco para que me abra de nuevo el autobús.

Si tu único objetivo en una prueba es acabar, lo mejor es salir en la última posición y así no te puedes picar absolutamente con nadie, es más, como mi peor enemigo suele ser el corredor escoba, me había preparado en secreto con un entrenamiento innovador: varios viajes  en el tren de la bruja para practicar como robarle la escoba sin que se enterase (si el corredor escoba eres tú ¿quien te va a descalificar?), pero desafortunadamente la organización se había enterado de mis intenciones y como son gente muy profesional decidieron sustituir al corredor escoba por 3 jinetes a caballo.

Los  3 "corredores escoba"
 Dan la salida y como estaba previsto salgo en última posición. Por delante lanzo  unas 500 "liebres" de rojo y azul cuya misión es marcarme el camino para completar los 22 km de la prueba. El tramo inicial de la prueba  es muy sencillo y discurre por una amplia pista descendente. Objetivo de partida: gastar las mínimas energías  y guardar piernas a nivel muscular por  el mayor tiempo posible. 

Primer kilómetro de la prueba

Al al paso por el lago de la Mina, completo el primer kilómetro en última posición  y con el estratosférico tiempo de 7':01" (un tiempo al alcance de muy pocos corredores), puede parecer sencillo, pero hay que ser muy, muy lento para correr tan despacio cuesta abajo. Comenzamos el ascenso a a la Vega de Cerveriz, momento que aprovecho para adelantar a mis 2 primeros rivales, y eso que mi ritmo no es precisamente endiablado y para muestra al paso por el km 2 llevo 17':10".Corono el alto y tenemos una pequeña bajada hasta alcanzar la amplia majada de Cerveriz


La niebla es espesa y limita la visión, lo que impide disfrutar del maravilloso entorno. Sigo poco a poco avanzando,  a ratos trotando muy suavemente ya ratos (la mayor parte del tiempo)  andando, cruzándome con vacas que pastan tranquilamente. Paso por el primer avituallamiento y enfilo la Vega de Camayor, cuando de repente y a escasos 15-20 metros me encuentro con un pedazo de toro impresionante, que me mira desafiante y me lanza un potente bramido. ¡Será cabrón el morlaco! Acaban de pasar por delante de sus narices  unos 500 corredores y no les  dice ni mú, y me ve pasar a mi y se pone me pone "chulín", claro que hay que ponerse en su pellejo, pasa el hecho de que pasen corriendo por sus dominios 500 humanos locos en pantalón de deporte, pero que le dispute sus dominios un "bisonte" y encima que vaya vestido de rojo para provocar, ya son palabras mayores. Finalmente nos cruzamos una mirada desafiante y cada uno sigue su camino. A estas alturas descubro porque siempre recomiendan probar el material antes de una carrera, mi supuesto chubasquero resulta ser únicamente una chaqueta cortavientos (a juzgar por el hecho de que de cada 3 gotas que caen, 2 traspasan el tejido), completamente empapado me lo quito  apenas 500 metros antes de coronar este segundo tramo  y empezar  el tramo técnico de descenso en dirección al  lago del Valle.

Tramo inicial de descenso hacia el lago del Valle
 Comienzo el descenso por las Divisas.  Con total seguridad voy entre los 20 últimos del pelotón, lo que me ocasiona  2 serios  problemas: primero que el sendero por el que ya han transitado más de 450 corredores es un autentico  barrizal y segundo que delante llevo a  muchos corredores sin experiencia y sin el material adecuado, algunos es la primera carrera que corren en montaña, otros van con zapatillas de carretera y van muy despacio y con muchisima precaución (en algunos casos  me atrevería a decir que hasta con miedo). La consecuencia es que  vas a remolque de una interminable fila de corredores, y te ves  forzado a bajar andando a un ritmo muy lento e  incluso tienes que detenerte completamente cada poco.


Por lo  poco que he podido probar y  aunque hay mucho barro, el terreno no es excesivamente técnico y  no percibo riesgo en la bajada. Se ve que hoy he acertado en la elección de neumáticos y que las pezuñas que me he puesto van de miedo por este terreno. Las sensaciones son buenas y tengo "mono" de correr, así que arriesgando un poco y saliendo de sendero por el que discurre la gente,  consigo ir adelantando no sin dificultad a unos cuantos corredores, de hecho hasta escucho comentar a algún rival ¡A donde vas jabalí! (es verídico como la vida misma)

 Poco a poco voy perdiendo altura entre la niebla.  Cada vez que consigo sobrepasar a un grupo de corredores ,  tengo unos 100 metros de margen hasta el siguiente y voy con la sensación de tener un par de velocidades más que mis contrincantes.  A pesar del  barro, las zapatillas me agarran bien y bajo con mucha confianza,  probablemente porque voy física y mentalmente muy fresco y porque después de haber disputado la carrera de montaña del  Alto Sil los 3 últimos años, el barro empieza a ser un elemento que me resulta extrañamente familiar.

Tramo técnico de bajada hacia el lago del Valle
Llegando al km 8, se acaba el tramo técnico. Llevo tanto barro en cada zapatilla,  que es como si me hubiesen colgado unos grilletes de los tobillos.  Apenas un km más abajo y por sorpresa, llegamos  al avituallamiento del Lago del Valle. Queda un mundo a meta y voy con mucha incertidumbre (y porque no decirlo, algo de miedo) respecto  al rendimiento que me darán  los cuadriceps de aquí a meta, pero las sensaciones hasta le momento son muy buenas, será culpa de la lluvia o será por el hecho de correr en casa, pero lo cierto es que  estoy disfrutando mucho de la prueba.

Arranco por lo alto de muro del lago para evitar el barrizal de la pista y en seguida entramos en la zona de pistas. Son pistas y senderos sin ninguna dificultad técnica y con pendiente descendente no demasiado pronunciada. Me limito a alargar zancada, a aprovechar la propia inercia del movimiento y a poner mi peso al servicio de la gravedad, lo demás es pura física. Veo a mucho corredor con excesiva prudencia o quizá con falta de pericia, no lo sé, pero lo cierto es que tengo la extraña sensación de tener mucha más velocidad punta que mis rivales. Acostumbrado conducir un Marussia, hoy me veo al volante de un Red Bull y es una experiencia nueva para mi, pero voy adelantando constantemente  a un montón de corredores.  

Aproximadamente en el km 11, la lluvia vuelve a arreciar con más fuerza y tengo miedo a que se me estropeé el Garmin con tanta agua, así que me quito el reloj con GPS y lo guardo en el bolso trasero del pantalón. A partir de este momento  me limito  a correr por sensaciones como en los viejos tiempos. Voy completamente "a ciegas",  desconozco a que ritmo voy,  cuantas pulsaciones llevo, ni cuantos km quedan a meta,  solamente me limito a escuchar lo que el cuerpo me pide  y a disfrutar como hacia muchos años que no lo hacía. A recrearme  con esos pequeños detalles que no siempre valoramos, con el olor a hierba y tierra húmeda, con la sensación de sentir la lluvia resbalandote por la cara y tener que correr con los ojos medio entornados, con la sensación de correr sin limites, los km van pasando y sigo pasando corredores y más corredores y cuantos más corredores supero más me crezco,  y eso que soy  incapaz de correr de continuo y cualquier tramo llano o el más mínimo tramo ascendente me sirve para pararme y caminar unos 100-200 metros, calculo que cada no mas de 700-800 metros,   lo que sucede es que cada vez que arranco voy mucho más deprisa que mis rivales, 

Tramo de bajada, donde se aprecia el barro

Algunos tramos de pista acumulan barro por encima del tobillo, pero en lugar de tratar de esquivarlos o buscar trazadas más cómodas, hoy si que bajo por el medio y galopando como un auténtico bisonte. A unos 7 km de meta me encuentro con el avituallamiento del Valle del Lago, entiendo que es le último y quedan unos 7 km a meta, pero en esta ocasión apenas me detengo. Creo que como si de un sapo se tratase, me he venido hidratando por los poros los 15 km previos. Como carezco totalmente de referencias decido contar cuantos corredores soy capaz de pasar hasta meta, con el fin de mantener un cierto pulso competitivo y tratando de aportar el mejor resultado posible para mi equipo.

El terreno es muy sencillo y muy cómodo para correr, sigue habiendo tramos de barro, pero los atravieso sin problemas y llegando a meta me vuelvo a poner el reloj para tener referencias, me marca km 18,5 así que teóricamente me quedan unos 3,5 km aprox a meta.  Miro el reloj y alucino porque veo ritmos de entre 3':35" y 3´:45" (no son ritmos reales por km porque los tramos que hago andando me bajan la media por encima de 4 min/km), pero que gozada. Hoy  las piernas responden, el motor ruge (organicamente voy muy bien) y la cabeza empuja como nunca. A falta de unos 2,5 km salimos de senda y entramos en asfalto y paradojicamente en vez de ir mejor, por primera vez en esta carrera lo paso mal. Es como si me hubiera quedado atrapado en un campo magnético, las piernas me empiezan a doler y tengo la sensación de ir más despacio, pero probablemente es solo una sensación consecuencia de correr sobre una superficie más dura, porque sigo adelantando gente, otro tramo de sendero para volar y entramos en el último km, otro tramo de asfalto, un sendero final y a galopar  por las calles de Pola de Somiedo, finalmente y  habiendo adelantado a 69 corredores (ni uno más ni uno menos en este último tramo). Entro en meta con la inexplicable sensación de que si la carrera durará 2 o 3 km más no pasaría nada y que podría haber corrido más rápido

A 100 metros de la meta

En meta alcanzo el puesto 270 de la general (sobre 480 corredores en meta, 486 en la salida y 624 inscritos) con un tiempo de 2h:32':14"  a 1h:01':28" del ganador que fue Martín Alvarez Espinar con un tiempo de 1h:30':46"
Entrando en meta
En la entrega de trofeos, se desborda la alegría cuando anuncian que León ha ganado su primera Batallona. Para mi ha sido un tremendo orgullo haber formado parte de el equipo que ha obtenido  este primer título (estoy seguro que no será el último)

Una representación de los 300 espartanos de León


Lo que he vivido hoy es difícilmente explicable, ha sido una inyección de moral y un chute de adrenalina. tremendo. Hasta hoy, acostumbrado a realizar más del 50% del recorrido andando en todas las pruebas que diputaba en montaña, el hecho de considerarme corredor de montaña era una frivolidad (a duras penas paso  de senderista "acelerado"), pero hoy si me he sentido corredor. Venía únicamente con la finalidad de acabar la prueba como buenamente pudiera y al final he conseguido adelantar a 216 corredores (la gran mayoría en los 15 km finales). Esta carrera se va a convertir en un fijo en mi calendario y el año que viene volveré, Para mi que tengo doble nacionalidad es muy difícil elegir equipo porque tengo el corazón partido, por lo que entiendo que la más justo es correr alternativamente cada año con un equipo, así que  si Dios quiere, el próximo año correré de azul y defendiendo a lo astures del norte (los leoneses son los astures del sur).

En meta con Virtxo Roca del grupo  #deportistasEII , haciendo honor a nuestro lema:"No hay quien nos pare". Paradójico ver un asturiano y una vasca defendiendo con orgullo los colores de León.




Próxima parada: Carrera de montaña Villalfeide-Polvoreda


Nos vemos corriendo